Casi todos recordamos a John Sculley como el responsable de despedir a Steve Jobs de su propia compañía y famoso por ser el genio creador del Reto Pepsi durante los años en que estuvo al frente de PepsiCo. Últimamente ha vuelto a la carga con el lanzamiento en México de su nueva marca de celulares: Obi Worldphone.
Steve Jobs lo convenció hace más de 30 años de que dejara de vender “agua azucarada” para unirse al equipo de Apple y “cambiar al mundo”.
Hoy en día Sculley es uno de los líderes y empresarios más respetados del mundo de la tecnología. El empresario de 76 años cree que aún es tiempo de cambiar al mundo lanzando celulares, un producto que si bien se está convirtiendo cada vez más en un commodity, en los “mercados emergentes”, incluyendo México, aún representan un área de oportunidad muy grande de negocio. Parece que así lo justifican los números.
El objetivo de Sculley con Obi Worldphone es acaparar entre un 1 a un 3 por ciento del mercado de celulares, cifra relativamente modesta si consideramos que en el último año el mercado de smartphones en México creció por arriba del 43 por ciento, cifra que representa entre 800 mil y 2.3 millones de unidades. Debemos de pensar que nuestro país representa un mercado potencial de 120 millones de personas.
La apuesta de Obi Worldphone es atacar al mercado de gama media y baja (bautizado por Obi como “mercado intermedio”), un nicho desatendido por las grandes marcas, enfocadas en celulares Premium, según Sculley.
Sin embargo, el mercado no deja de estar saturado de celulares cada vez más accesibles con buenas características técnicas. Por lo que una de las dudas más importantes es cuál es el diferenciador que tiene que ofrecer Obi Worldphone que otros fabricantes de celulares ya presentes en México no ofrezcan.
Y es la marca John Sculley. Pocos competidores en el mercado pueden presumir haber trabajado y aprendido directamente de Steve Jobs. Y si hay algo que aprendió muy bien de Steve Jobs es que en la industria de la tecnología el diseño importa, y mucho.
De ahí que su arma “secreta”: introducir celulares enfocados en el (gran) diseño, celulares bonitos que las personas no solo necesiten, sino que quieran tener.
Les compartimos el video del celular de Sculley. ¿Qué les parece? ¿Tendrá éxito en nuestro país?