Hoy en día, gracias cada vez más a la apertura de Internet, cualquier persona está al alcance de la información que todos compartimos, especialmente los menores que no siempre tienen en cuenta los criterios de seguridad.
A pesar de que las redes sociales tienen un mínimo de edad establecido (13 años), muchas veces estos adolescentes actúan a escondidas de los padres. El debate de seguridad respecto a si los papás deben o no tener la contraseña de sus hijos es enorme. Algunos consideran que dependiendo la edad y la plataforma, los padres deben estar al pendiente de las publicaciones de sus hijos.
Uno de los peligros principales de socializar en Internet es el de compartir demasiada información, o publicar comentarios, fotos o videos que pueden dañar la reputación o herir los sentimientos de alguien más, lo que muchas veces desencadena el famoso bullying e incluso, hace que los menores sean presa fácil de trata de personas, secuestro y abuso.
Los padres deben tener presentes ciertos criterios al hablar con sus hijos sobre el uso de redes sociales como el hecho de hacerles saber que todo lo que publican en línea no se puede eliminar, ya que aunque traten de borrar la información de un sitio, ésta se mantendrá en las computadoras de otras personas que pueden hacer mal uso de ellas.
Otro de los puntos importantes es hacerles saber que cada cosa que pongan en su perfil, será visto por gente desconocida incluso si tiene activado el nivel más alto de seguridad, por lo que explicarles también que la información personal como números de cuentas bancarias, seguro social, domicilio, número de teléfono y demás, no deben ser compartidas con absolutamente nadie.
Debido a que las redes sociales se prestan a que otros usurpen identidades y sea más fácil engañar al menor, es importante tocar el tema del contenido sexual en Internet. Investigaciones demuestran que los adolescentes que no hablan de sexo con extraños tienen menos probabilidades de entrar en contacto con acosadores o abusadores.
Con todo lo mencionado, llegamos a la conclusión que los papás deberían considerar si su hijo debe o no tener una red social y en caso de que así sea, tienen la obligación de modificar las funciones de privacidad, para restringir el acceso a los perfiles de sus hijos.
La Fundación Alia2 de España elaboró un Código Cibernético para niños. El objetivo de este código es que los niños entiendan y asuman sus responsabilidades al utilizar Internet:
1. Tendré en cuenta que las personas que conozco por Internet son desconocidos en la vida real: NO SON MIS AMIGOS.
2. No publicaré información personal como mi teléfono, dirección etc, en Internet
3. Cuando se publica una foto en Internet, se pierde el control sobre su difusión y duración. Aunque después se borre, no desaparece de la Red.
4. En Internet hay que comportarse con respeto y educación. No hagas a otros lo que no quieras que te hagan a tí.
5. Denuncia a las personas o las acciones que perjudiquen a los demás. Si conoces alguien que esté siento acosado, DENÚNCIALO.
6. Si adquieres un teléfono celular con Internet, desconecta la opción de geolocalización, así cuando publiques en tu muro desde el móvil, nadie sabrá dónde estás.
7. Guarda las conversaciones del chat, ya que te puede ser útil en caso que haya algún problema.
8. Si me ocurre algo que no me haga sentir bien en Internet, se lo comunicaré a mis padres. Tengo que saber decir NO a las cosas que no quiera hacer y contar con mis padres que son mis mejores aliados.
Fuente: http://www.sdpnoticias.com/